El Día de los Reyes Magos, también conocido como la Epifanía de Jesús, es una festividad cristiana incluida en el calendario litúrgico que se celebra anualmente el 6 de enero. Tuvo sus inicios entre el sigo III y el siglo IV de nuestra Era, en la también aurora del cristianismo. Se conmemora la adoración por parte de los Reyes Magos al recién nacido Niño Jesús, donde le obsequiaron tres regalos: incienso, mirra y oro. En cuanto a la Epifanía, significa la revelación de Jesús ante el mundo pagano, a los no judíos, representados en los Reyes Magos.
Después del nacimiento de Jesús en Belén de Judá, llegaron desde el lejano oriente, guiados por una estrella en el cielo, tres Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltazar (la palabra mago viene de la lengua persa maguusha que significa Sacerdote Sabio, por lo que también se conocen como los Sabios de Oriente). Pero en su paso por la ciudad de Jerusalén, fueron presentados ante el Rey Herodes I, quien les pidió que de regreso le revelaran a él el lugar donde se hallase el niño, con el fin de también visitarle y llevarle obsequios. Los Reyes Magos, continuaron su camino hasta llegar a Belén y encontraron a Jesús en un pesebre. Allí lo adoraron como el rey de reyes y le dieron regalos. Estos fueron el incienso, la mirra y el oro.
Pero la noche antes del regreso a oriente, los Reyes Magos tuvieron un sueño donde fueron advertidos de las intenciones de Herodes de asesinar a Jesús, por lo que al día siguiente, no sin antes poner sobre aviso a José y María, tomaron otro camino a casa sin pasar por Jerusalén. Esto desató la furia de Herodes quien ordenó asesinar a todos los niños menores de Belén, lo que se conoce como la Matanza de los Santos Inocentes.